La convocatoria de Merlo: mafia, drones y espárragos

Por Gerardo Gallo Candolo / LA TERCERA, el diario del Conurbano Sur

Productores de Merlo reclaman por los “Tasazos” que les está aplicando la comuna de Merlo por sus terrenos. Son espacios de producción ubicados en zonas rurales que fueron recategorizados como urbano y sus tasas aumentaron hasta en un 2500 %. Tienen miedo de perder sus tierras, que otrora fueron un vergel de producción y trabajo.

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Productores esperan ansiosos al ministro de Agroindustria provincial. El ministro Leonardo Sarquís está en camino y en la previa LA TERCERA indagó a los presentes. Un productor, reconocido por sus pares como uno de los mejores horticultores de la zona, explica que vende en el Mercado concentrador de Morón; otros están estudiando mandar también a los nuevos de Ituzaingó o Moreno, verdura de hojas, tomates, espárragos, la lista sigue.

Flora tiene 10 hectáreas y también hace huerta en gran parte de su terreno. Bernardo cuenta que tiene en una hoja de cálculo a gran parte de los involucrados: superficies, direcciones, lo que producen, lo que pagaban de impuesto municipal entre otros datos; administra una base de whatsapp con unos 350 propietarios que él ayudó reuniendo voluntades. También hay viveros, profesionales y empresarios que tienen terrenos en el área.
Conversamos con un inversor, en este caso de dos hectáreas: “No sé lo que vale ahora por este problema, ni sé que me conviene hacer”, explica angustiado sobre su terreno que fue horno de ladrillos. Hay muchos en la zona, terrenos decapitados porque usaron años atrás su capa arable para fabricar ladrillos y hoy se los conocen por tener hasta un metro menos de altura que los circundantes. Bernardo explica que aquellos terrenos que no se tocaron para ladrillo son lo mejor de la provincia; desde allí a Pergamino se extiende ese vergel de tierra cultivable que empezaron a trabajar portugueses, famosos por sus espárragos y la forma esmerada de trabajar la tierra; algunos descendientes, otros fueron empleados de esa camada de europeos que a fuerza de trabajo compraron alguna hectárea, muchos encontraron el modo de ganarse la vida en la forma más natural posible: vivir en el campo trabajando la tierra, cultivando su propia comida, criando animales y vendiendo excedentes.

Los vecinos se conocen mayormente desde hace mucho pero la circunstancia los obligó a verse más seguido y conocerse mejor.

A principios del año pasado empezaron a llegar las boletas del impuesto municipal, ABL, ¿Alumbrado, barrido y limpieza en la zona rural? Pero lo peor del caso fue el porcentaje de aumento. Este cronista empieza a indagar las boletas de 2017 y 2018; ésta ultimas con aumentos de 45 a 250 veces más que las del año anterior: ¡Increíble!, es que para el municipio de Merlo la zona por donde pasará la Autopista Perón, (esa ruta paralela a la ruta 6 y el Camino de Cintura), es toda zona urbana y de un día para otro comenzarían a pagar por metro cuadrado. Eso se consiguió por una Ordenanza que resultó aprobada con 23 votos de 24 concejales, es decir con el apoyo de todo el arco político.

Ese fue el momento de organizarse y después, varios de ellos, presentarse en la justicia. Ese camino se vislumbra exitoso y se pueden sumar aquellos que no lo hicieron de entrada. Esa fue una excelente noticia recibida en la reunión para muchos de ellos que les llegaron las boletas 2019 con nuevos aumentos. Los productores no pagaron, salvo aquellos que lo tenían por débito automático y contaban con esa cifra en la cuenta.

Cuando el ministro los reúne y comienza el intercambio se vislumbra una emoción que embarga a los propietarios: angustia.

Leonardo Sarquís, ministro de Agroindustria bonaerense.

Miedo a perder sus tierras, que el Municipio se los expropie por no poder abonar este impuesto: imposible pagarlo con la producción, explican. Sarquís los tranquiliza aclarando que para ello deberían pasar por La Plata y el tema de ser Urbano o Rural es una cuestión de Ordenamiento Territorial; para la provincia siguen siendo rural, no puede cambiarse el Registro Catastral, dijo, y promete ponerlo al tanto al ministro de Gobierno.

Pero hay otro motivo que los angustia; a medida que entran en confianza con el funcionario le explican de amenazas y señalan hechos concretos: desde que empezaron a organizarse sufrieron quemas de campos, más de 40, muestran fotos de los fuegos, y galpones incendiados, amenazas personales y hasta drones sobre las viviendas de aquellos líderes que comenzaron la resistencia.

El miedo persiste, algunos no fueron a la reunión por ese motivo, otros que estuvieron presentes no quisieron salir en la foto final de la reunión. Las palabras del ministro para tranquilizar fueron importantes pero no parecían suficientes.

Sarquís se propuso dar soluciones y trabajar en conjunto. El tema de posibles créditos no pareció interesar a los presentes, pero el de “Microcuencas”, concepto que se está llevando adelante en otras regiones bonaerenses les pareció útil para dar valor agregado a la producción. También se habló de GLOBA, la Agencia de Promoción de Inversiones y Comercio Exterior de la provincia de Buenos Aires que, en otros partidos, está ayudando a exportar a pequeñas empresas bonaerenses.

La reunión resultó positiva a todos los consultados, el clima es diferente después del intercambio con el ministro: las buenas noticias desde la Justicia, seguir siendo rurales y las posibilidades de dar valor a sus productos les resultó suficiente para tener una visión más optimista respecto al futuro de su estilo de vida.

El presidente Mauricio Macri aseguró —hace horas— que “su gestión terminó con las mafias y las avivadas”. Esta es una buena oportunidad para que los productores de Merlo sientan esta afirmación en carne propia.

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